Santanyí, situado en el sureste de Mallorca, es un pintoresco pueblo conocido por sus edificios de piedra arenisca dorada, sus animados mercados semanales y sus impresionantes paisajes naturales.
El pueblo ofrece una auténtica atmósfera mallorquina, con estrechas calles, acogedores cafés y galerías de arte.
Santanyí es también el punto de partida perfecto para explorar playas cercanas como Cala Santanyí o la famosa Cala Mondragó en el parque natural.
Los visitantes pueden disfrutar de la tranquilidad del entorno rural mientras saborean la excelente cocina local en los restaurantes de la región.
Santanyí es un paraíso para los amantes de la naturaleza, la cultura y la gastronomía.